Le doy la razón a
Sergi, que tras el partido manifestó que el equipo empezó a competir en el
minuto 46, le doy toda la razón, aunque le faltó decir que los goles lo
marcaron sus jugadores, los que no compitieron, y no darse todo el mérito de
que llegaron porque eso fue lo que se trabajó, que no digo que no sea verdad,
digo que tiene que tener tacto.
Primera mitad para
recordar por el resultado y para recordar para saber lo que no se tiene que
hacer, para recordar que siempre hay suplentes y titulares, y eso
lo dan los momentos de forma por los que se atraviesan, para recordar que sin
intensidad, sin buen hacer, sin actitud no se consigue nada, aunque nos fuimos
al descanso con el resultado a favor, para recordar que no se puede tentar
tanto a la suerte.
La primera mitad,
en el apartado técnico también tuvo sus lagunas y eso no es solo culpa del
jugador, también del técnico. Se volvió a intentar tocar en la línea de
defensa, lo que le facilitó la presión al filial, se pecó de intentar jugar en
corto, sin avanzar y el filial nos puso contra las cuerdas.
La segunda mitad,
se mejoró en colocación, se mejoró en actitud, no se jugó al toque , se buscó
los cambios de orientación, se jugó más en largo, si despejó cuando se tuvo que
despejar, se corrigió el mal partido de Morcillo, sacándolo del campo, se tiró
de veteranía ante la ansiedad de los chavales del Madrid, y se acertó en los
cambios aunque alguno se hizo tarde.
Todo lo que se
mejoró, fue por los jugadores y también por el entrenador, ahí Sergi se
equivocó en reprochar a sus jugadores para destacar su trabajo. Todos a una y
sin gilitoque, así, siendo sólidos y sabiendo leer los partidos, así sí, y es
cosa de todos. El aguantar el resultado fue responsabilidad de jugadores y
técnicos, de todos.
Destacar el partido
de Cabrero, muy por encima del resto.
La veteranía se
puso de manifiesto dentro del campo, se pudo, se hizo, se consiguió haciendo el
trabajo, con lo cual los 3 puntos a nuestro casillero y todos tan panchos. Al
final de liga nadie se acordará del juego de este partido pero si se recordará
que ganamos, sufriendo mucho, y eso también cuenta, aunque tiene su riesgo
tentar tanto a la suerte y cuidado que ahora está de cara y ya sabemos que es
cambiante.
No se puede olvidar lo que nos ha llevado a
ser líderes, la solidez como equipo, la verticalidad, la velocidad, el acierto,
la actitud y la solidaridad dentro del campo. No puede cambiarse, no podemos
volver al gilitoque, no podemos volver a las andadas de tocar y no avanzar,
debemos de seguir en la tónica de antes del partido del Tenerife, que ya se
intentó volver a jugar a nada. El camino está marcado y sería de torpes no
seguir ese camino, que por cierto, creo que es el único camino. Como diría mi
amigo Antonio Zambrano, el fútbol es para listos, así que no seamos torpes.
Conclusión, somos líderes, bien. Hemos ganado, bien. Hemos
batido el record de victorias seguidas, bien. Salimos reforzado, bien, pero no
olvidemos cual es el camino, que por cierto, ya está marcado y nos ha llevado a
ser líderes.
PD: jugador que juegue con el cuello “parriba”, al
banquillo.
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